Uno de los objetivos marcados para este 2024 ha llegado este último Sábado 20 de Abril, la Marcha Sierra de Albacete, que cumple su tercera edición yendo a más de una forma violenta y efervescente: más asistentes, más prensa, mejores servicios,... Es bonito ver cómo se llena la pequeña población de Riópar de ciclistas y acompañantes creando un ambiente multicolor que lo inunda todo.
El primer año, 2022, se celebró en Julio coincidiendo con 'nuestra' Marmotte, ese año mandamos a nuestros mosqueteros José Antonio Sánchez, José Antonio Ramos y Francisco Cánovas como regia representación, el año pasado continuamos con presencia del club tomando yo el testigo de José de San José junto con Zape y Paco que repetían. En esta ocasión, en 2023, ya se celebró en Abril y resultó todo un éxito y en este 2024 ya hemos venido para limpiar la capaza, 19 socios inscritos y volviendo de aquellas tierras con carne de marrano curada por partida doble, por participación numerosa y luego por dos de nuestras guerreras, Mari Cruz y Esmeralda, que se subieron al cajón de las vencedoras en la distancia Medio Fondo. Otro que tendría que haber cargado algo fue José 'Cámara' con su impresionante tercera posición en Master 50 pero el criterio de los organizadores no lo contemplaba así. -Le tocó Ramadán-
La organización de la expedición ha resultado sencilla porque todos los compañeros han puesto de su parte, destacar por supuesto la oferta de Nífer poniendo su furgoneta a disposición del grupo siendo un apoyo fundamental en la logística de la expedición. El alojamiento creo que cumplió bien con lo que se le exigía y aportó comodidad y dos raticos muy agradables como fueron el desayuno previo a la marcha y la sobremesa tras la paliza. En el piso éramos diez zamarros con todas las de la ley, el pisito de 'los solteros'. Los 'casaos' iban por otra parte, Mari Carmen-Juan, MariCruz-Lilo, Esmeralda-Felipe y Espartaco con su querida (esposa). Y por otra parte referir que Dani Rufete, que tiene familia allí en el pueblo no pudo participar por lesión. Por último mencionar a Juan 'Buytrago' que, aunque apuntado por el club, viajaba con otra expedición.
Pues en esas estábamos, con un equipo femenino potente en forma de tridente con Mari Carmen de puntal en la distancia larga y Esmeralda y Mari Cruz en la media distancia. -Vamos que vais segunda y tercera de las chicas! Esto es lo que de pronto les comunicaron una vez que habían tomado la desviación de la distancia media. -Jooo, pues habrá que vigilar los espejos retrovisores para abrir codos si es que llega alguna por detrás. Y eso hicieron. Y llegaron al unísono, con el mismo segundo pero como las copas no se podían partir para que se llevara cada una de ellas mitad y mitad, MariCruz fue 'segunda' y Esmeralda 'tercera'. Éxito total, estaban muy contentas y nosotros igual o más que ellas de verlas allí arriba encaramadas en el podio.
Como embajadores de la marcha estaban Melcior Mauri que repite por tercer año (le gusta!) y Roberto Heras, cuádruple ganador de la Vuelta a España y uno de los mejores ciclistas del mundo aunque, eso sí, está enclenque perdido y al tocarle un poco el hombro te da la sensación de que se va a desmontar. Lo dicho, flojo flojo aunque no precisamente para ganar las veces que -quiera- la Titan Desert por ejemplo.
Pues ahora vengo yo, con problemas en las semanas previas en forma de bronquitis en Semana Santa y viaje cervecero a Praga la Semana de Primavera por lo que entre pitos y flautas (50.000) he dado un bajón de rendimiento del que a pesar de remontar algo a última hora me ha pesado en el día de la marcha pero como siempre digo y pienso, hay que adaptarse a lo que hay y a las circunstancias y no me olvido de dar gracias a Dios todos los días que me monto en la bici después de pasar el calvario vivido durante años con mi maltrecha espalda.
Salimos el Viernes en varios coches, en el mío viaja José María Perez, el de Ciudad Rodrigo, y Ortega Lara, digo Pedro Arenas, rescatado del secuestro que sufre por parte de la banda 'terrorista' esa que le marca los entrenamientos. Sin más que contar llegamos a Riópar y nos juntamos con el resto del grupo para 'okupar' el piso franco que tenemos para la ocasión. Una vez todos metidos en sus cuartos la cosa está bien pero antes parece aquello el camarote de los hermanos Marx porque el salón está pensado para los siete enanitos de Blancanieves pero no para diez tiacos, algunos grandes como torres.
En el Asador Emilio toca hacer la dieta pre marcha, compuesta de ensaladas de la casa, pasta de Bologna al punto, carnes a la brasa y todo regado por cerveza a la carta, unos con, otros sin, unos tostadas, otros de la tierra, e incluso alguno se lanza a un vino tinto del terreno y otros por agua de manantial. Se remata la jugada con un postre casero: arroz con leche, flan, tarta de queso, en fin, todo bueno, rico y barato y la velada muy agradable y cálida, esto último gracias a la cercanía de las brasas que hacía que aquello fuera lo más parecido a estar en Cancún, México (lindo)
La noche la pasamos bien, al menos en mi caso, me he despertado en un par de ocasiones, normal para un tío de mi edad, y a pesar de escuchar sonidos como si estuviera en un aserradero, -no sé si me entendéis-, he podido conciliar bien el sueño y ha sido reparador que se dice. El despertar y la puesta en marcha es agitada porque los nervios están ahí, -señores que nos vamos a dar una vuelta del copón por las sierras de Albacete, no es para menos. Sin embargo, la armonía ha reinado siempre en el grupo y las bromas y las gracias se sucedían en un desayuno que ha sido muy agradable y fraternal.
Al salir hay una niebla que lo cubre todo pero no hace mucho frío, se prevé un día espectacular de clima, como así ha sido por fortuna. En la salida hacemos dos grupos, los madrugadores,
Lilo, Felipe, Mari Cruz y Esmeralda
junto con los 'espabilaos', citados están José de San José y el Profe que se han colado por un 'bujero' y un segundo grupo que nos colocamos más atrás y a los que se añaden Mari Carmen y Juan que se cuelan por encima de la valla pues se les han pegado las sábanas más de la cuenta. Unas fotos y ya queda poco para salir cuando hay un zamarro que colándose por encima de la valla se cae, empuja a una chica que me empuja a mí pfff, como si fuéramos fichas de dominó. - Venga, no ha pasado nada. Aunque la chica tiene una cara de mala hostia importante y le dice algo con 'cariño' al responsable de aquello.
Bueno, dan la salida y nos vamos. De pronto me doy cuenta que llevo el GPS torcido, intento ponerlo derecho pero,.... -¿qué pasa?, si no es el GPS.... -hostias, es el manillar que está torcido. Total, que antes de cruzar el paso electrónico me paro y 'reparo'. Afortunadamente es fácil y rápido pero más rápidos aún salen los ciclistas de allí y... me he quedado 'solo'. Mis compañeros se han ido todos. Nada, nada, habrá que hacer un esfuerzo y cazar a mi grupo, al menos a mis afines deportivamente hablando. Y me toca un calentón y al cabo de un rato algo angustioso empiezo a ver globeros cercanos. Bueno, al menos hemos salido de la 'soledad'.
Arrranca puerto, -Crucetillas-, este año subido mucho más rápido que el pasado, lógico, está al principio y vamos todos excitados por la jauría que llevamos alrededor, no es para menos. Además, algunos compañeros se empeñan en quemar naves ya temprano. -Oye, por cierto, que hemos hecho como los aviones, subir por encima del mar de nubes en el que queda Riópar y hace un calorcete importante. Me abro el chalecomanta (hoy he cogido el borreguero) y no me lo quito ya por yo-qué-se, pero abierto de par en par sí que va. A todo esto me viene a la cabeza que Zape advirtió en su Carta a los Corintios -Hermanos, nos veremos en meta. Y de momento no se le ve el pelo, ha salido en modo moto. Buytrago se zarandea sobre su bici y allá que se va 'palante', Rafa también y Óscar.... -¿qué hago? Pues yo me quedo de momento, pasamos a Mari Carmen (y Juan) que salió a tope, y a las dobles parejas globeras. Aprovecho para sacar una foto a Esmeralda y a Philippe que estaban fáciles, los otros al final se me escaparon del objetivo. En otra marcha será...
Y allá que vamos, al llegar al Alto el primero de la clase es José 'Cámara', luego Zape, Rafa, Óscar y yo. Por detrás Buytrago, Belmonte y luego los demás. La mañana está perfecta para no ponerse el chaleco en la bajada. No me lo pongo y en la siguiente subida va al bolsillo hasta el final. Los paisajes que surcamos son de una belleza extrema y el segundo puerto, el Barrancazo, se deja subir muy bien por una carretera estrechita que a estas horas de la mañana da gusto ir por ella.
En la bajada del segundo puerto hacemos un grupo majo de unos veinte ciclistas y por un tiempo vamos tranquilos, qué gusto, así se puede disfrutar mejor del entorno por el que nos desplazamos; y del fantástico día que nos ha tocado, luego un poco más adelante, por los alrededores de Paterna nos juntamos los Tres Mosqueteros, y vamos administrando las fuerzas lo mejor que podemos pero tras el no-puerto y que llega el tercer puerto, el motor de la Spartacus de Pacheco empieza a ratear y a dar pistonazos, lo miro de reojo y veo que se está quedando. Muy pronto para lo que queda, yo como Joe Rigoli, sigo, y me asocio con Rafa que se ha visto descolgado de un grupo y a partir de ese momento llegamos a un trato: yo adelanto un poco en la subida y tú me atrapas (y superas) en la bajada, se va repitiendo la historia en las sucesivas ascensiones que quedan hasta el final.
A todo esto, de paradas cero, -¿por qué? Bueno, llevamos el zurrón lleno de barritas, geles y hostias de esas más un plátano y los dos bidones que todavía están sin gastar, para eso llevo un motor TDI de bajo consumo. En el pueblo de Ayna hay una animación 'quepaqué', da gusto ver como están las familias, los grupos de amigos y los niños con ilusión viendo a los ciclistas 'correr'. Y esos somos nosotros, protagonistas por un rato del día en ese pueblo tan mágico.
Sin esperar a que nos planten por los pies en un huerto como en la película de Amanece que no es poco, pasamos por el pueblo y nos enfrentamos, tras atravesar un par de túneles, al siguiente puerto, y al tramo cronometrado. Anda que provocó alguna reacción en mí ese anuncio jajaja, a mi plín, no tengo ningún interés en hacer tiempo, ni aquí ni allí. Vamos a concentrarnos en el estribillo del Dúo Dinámico mejor que dice: -Resistiré
El Pontarrón es un puerto que se hace largo ya, y más porque tras la subida formal llega un terreno duro que cuesta vencerlo y eso cansa, no obstante las piernas parece que van bien y 'resisten' los empujones aunque tampoco voy tirando cohetes, está claro, mis condiciones se basan en cumplir escrupulosamente las medidas de ahorro y en esas me aplico lo mejor que puedo. Por fin llega un terreno más favorable y luego la bajada a Molinicos que me encanta.
Aquí, en Molinicos, hacemos la única parada del recorrido, yo lleno un bidón porque el otro todavía me aguanta casi entero. Lo lleno de agua y espero a Rafa.... -Date prisa que nos pilla Buytrago que no para ni a mear el cabrón. Jajajaja Salimos y encontramos un terreno 'pestosete' que se agarra a las ruedas pero bueno, no pasa nada, a cambio el tiempo se va manteniendo cojonudo para donde estamos. Tras ese tramo tenemos una bajada hasta llegar al embase y retorcer el rumbo 180º para adentrarnos en un vergel, ambiente de cañada, fresco, verde y humedo por una bonita carretera que por otra parte ya sabemos que es el principio de una buena encerrona.
Por estos parajes me encuentro con Javier García Morcillo, 'el alcalde' de Riópar, porque aunque ahora no lo sea, lo ha sido durante muchos años y se le conoce y reconoce por ello. - Como anda el tío! Mejor lo pillo cuesta abajo porque parriba va dando unos zapatazos que se escapa hasta de su sombra. Echamos un ratico de buena tertulia y luego cada uno a sus deberes, él se va de nuevo cuesta arriba como alma que lleva el diablo y yo empiezo a pensar en los santos que me pueden ayudar a salir de esta, mejor un arcángel que llevan alas aunque San Rafael Rosagro va por detrás, se conoce que se le han tostao las alas como a Ícaro.
El cruce que marca Las Quebradas es de esos de películas de miedo y terror, bufff, qué pereza ver dónde hay que llegar, nada, nada, la mirada al suelo y los pensamientos a otra cosa. Cuando llegan los rampones que superan porcentajes de 16 y 18 por ciento subo en agonía total, resoplando como un búfalo malherido y dando chepazos como puedo. Bufff, me pasan hasta los caracoles, menos mal que hay otro como yo, moribundo perdido, y nos animamos -pero sin hablarnos-, que eso cansa. El año pasado lo subí mejor pero claro, estaba más entero, este año por aquí voy cascadísimo (me dice el corrector que se dice cansadísimo,... tamien!) . En fin, vamos vamos, que poco a poco llegaremos. Menos mal que en el fin de puerto se pone más tendido el terreno, luego comienza una bajada con un poco de gravilla y vienen los pasos de agua acondicionados para que pasen las bicicletas por unas alfombras (bien!) y tras un terreno de dar pedales llega el último de los puertos, El Pardal.
Estoy contento porque al menos he superado Las Quebradas sin calambres en las piernas pero tras el esfuerzo y luego la bajada me pasó lo que pasa en la QH en Hoz de Java, que la electricidad te sube desde el dedo gordo hasta lo alto de la zanca, cuidao, cuidao! Me ha pegado un trancazo el vasto interno de la pierna izquierda que ni te cuento, meto plato y así voy hasta arriba del puerto, con un par de compañeros que me refieren también problemas importantes de electricidad. Los cancerberos se ensañan con los ciclistas por esta zona.
Pues al final he subido todo El Pardal en 'plataco' y llega la bajada. En este puerto hemos encontrado de pronto a muchos ciclistas lentos, y es que eran los rezagados de la Media Fondo y la diferencia de velocidad era muy notable y proporcionaba mucha moral, parecía que estabas fuerte y todo jajajaja. En el cruce de El Peralejo hay ambulancias para resolver algún caso que pudiera haber de decrépito súbito. Rafa no sé si se ha quedado a comer en Las Quebradas en la casa de algún vecino, no sé nada de él. Por mi parte, -Chicos, esto está hecho!!!!
Queda una bajada, un llano y luego la subida al pueblo. Voy bajando con un par de asociados cuando de repente... aparece San Rafael por allí, qué tío, cómo baja de rápido. Y lo bueno es que tiene fuerzas todavía para apretar y apretar y soltar a gente como si estuviera enfadado con el mundo. -Que me quedo cojones!!! Y al final así fue, en el repecho del pueblo pues eso, que yo estaba ya para los restos y se me fue el Rafica de los güevos por delante. Menos mal que al menos me esperó para la foto de los terminadores. Cierto que pensé, -si debo tener unos 45 segundos o así de comodín por la salida retrasada por el problema del manillar pero no, al final, no sé ese tiempo dónde fue a parar.
Bueno, pues en meta ya está José de San José que ha llegado hace casi una hora para hacer tercero en su categoría, puestazo!!, está fuerte como el vinagre de bodega, juega en otra liga, Zape ha estado soberbio y ha cumplido con su promesa, -Nos veremos en meta señores. Me ha metido casi tres minutos y ha cancelado la deuda del año pasado. Han llegado hace rato también las dobles parejas que han hecho la Medio Fondo, con pisada de cajón doble como he dicho al principio y los 'novios' Felipe y Lilo entrando en meta juntos. Enseguida llega Buytrago que pone su motor en marcha en la salida y ya no lo apaga hasta la meta, motor robusto como ninguno. Luego aparece por meta Antonio Belmonte, entero y haciendo un muy buen tiempo, a continuación Mari Carmen con una segunda plaza en su categoría, -mira a ver MariFé! y su héroe de confianza SuperJuan. Óscar Pacheco ha conseguido meter el autocar por el puerto de las Quebradas sin volcar, mucho mérito por su parte, por lo que también está ya con nosotros con su sonrisa y buen humor habitual.
Faltan cuatro gladiadores por llegar: Arenas, Nífer, Profe y Espartaco.
Hablemos de los primeros, los renegados, los que se apuntaron al Gran Fondo y quisieron 'atajar' como Pierre Nodoyuna por la Medio Fondo. Error, craso error, hubieran sido objeto de la descalificación como le ocurrió a Juan 'Buytrago'. Hay que aapeechuugaar y cumplir con lo firmado. Y lo hicieron, vaya si lo hicieron pero de manera inconsciente, fue porque se equivocaron de camino jajajajaja, y como llevaban su dorsal de Gran Fondo los inspectores no les dijeron nada, -qué les van a decir? Y allá que se metieron en la boca del lobo. Cuando se dieron cuenta era demasiado tarde como para volver y resultaba más 'fácil' trepar por Las Quebradas que otra cosa. Y así al final conocieron la belleza de una parte de esta bonita sierra y por otra parte les sirvió para darse 'zapatilla' entre ellos como buenos competidores que son.
Y ahora hablemos de los segundos, los Master del Universo, -dónde capullo están? Preguntamos a la organización y nos dicen: -pasaron por Las Quebradas a las 14:50 -Buenooooo, pues está muy bien, parece que no se quedan a vivir por allí. Echamos cálculos de cuándo llegarán para recibirlos como se merecen pero como llevábamos lío con el piso y las llaves de pronto,.... -Hotia, si están ya aquí!!! Joder, qué alegría verlos. Están radiantes, para dar otra vuelta, felices, satisfechos. así da gusto, terminar las cosas bien. Han tenido problemas con la rueda de Ginés (de nuevo) y han hecho sociedad los dos para ser más fuertes y cerrar esta marcha, la tropecientas cuarenta y una del Profe y uno o dos menos de Ginés, 'Espartaco'.
Ya estamos todos en 'casa', toca comer sentados, muy a gusto con buena comida y bebida fresca (y miguelito de chuparse los dedos) comentando las jugadas y luego subir al podio para recoger el jamón al club más numeroso (ya iba siendo hora de retornar a estas cosas) de manos de Roberto Heras y Melcior Mauri.
Lo último a destacar un cafécito con tarta de manzana y galletas que nos tomamos en el piso pasando un rato muy bueno y entrañable antes de recoger y tomar camino de Murcia.
Felicidad y satisfacción por los deberes cumplidos.
Mi enhorabuena más efusiva a mis compañeros por todo lo conseguido y gracias de corazón porque hacen que las cosas que me suceden sean mucho mejores.
¡Hasta la próxima!
¡Hasta la próxima!
Gran crónica como siempre
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