viernes, 24 de mayo de 2024

Poder Globero GE

 

Otra buena mañana la que hemos pasado, hoy el recorrido era de media montaña, haciendo Canteras, Pilones, Rebate y cosas de estas que sin ser montañas tampoco son carreteras llanas, son picaditas pero hacen cosquillas a veces. Y si no que le pregunten al Primo que hoy le hemos hecho sufrir un poco. Y eso que ir a Pliego es parecido y va más allí que al water de su casa. En cualquier caso, se espera un poco, se reagrupa el 'ganado' y a continuación se da gas de nuevo.
En el Carrefour nos encontramos con la cuadrilla esperada, es difícil ya pensar en que se acerquen los 'trastornaos', ya no es ni por coche de apoyo, ni por si la ruta es hacía el Norte, el Sur, el Este o el Oeste, ni por distancia ni desnivel ni por la hora ni ni ni por ninguna razón normal, no sabemos si lo que no les gusta es la compañía. Nosotros, los asiduos participantes de las actividades del club, creo que no les hemos hecho ni dicho nada malo. Tampoco se animan a la excursión de Sierra Nevada y por contra se organizan otra a Pirineos -privada-.En fin, cuentan los reels y esas cosas actuales que tienen nuevos proyectos y emociones. Por las RRSS nos enteraremos de más cosas. Quizás.

Bueno, vamos a lo importante, lo que ha pasado hoy. Nos hemos juntado un grupo muy bueno en el que hay incorporaciones interesantes como la de nuestro amigo Guillermo de Ponte Otra, siempre fuerte y siempre con su alegría en la cara. Está José 'Camara' que viene ya de un Garruchal y una Cresta, -para calentar-, y que hoy al final se ha marcado el doble de desnivel que la mayoría de nosotros y 200 kms, un ensayo de la QH que tiene a la vista. José de San José ya bien tempranico nos lleva a un ritmo importante, de manera que las conversaciones se terminan subiendo a la Venta del Pino, está como Pogacar, atacando sin atacar, con una forma física brutal. ¡Vaya fenómeno!
Los demás vamos aguantando como podemos, la sección femenina está funcionando a las mil maravillas, no se quedan en ningún repecho, y hablando de repechos y de que no se quedan, ahí tenemos a Espartaco que sigue de dulce y al Profe que mantiene la bandera en todo lo alto, menudos campeones. Todo llegará, lo digo por la edad, y a ver como llega(mos) más de uno.
En las cuestas del Pino se resiente Alfonso Guillen y en Torremendo se procede al rescate, como lo que se hizo en su momento con los bancos, éste, Alfonso, tiene las patas de un banco, de perras ya no sé cómo va. -Venga, palante cojones! En la subida a Los Pilones empezamos suaves para intentar llevar a la gente parriba pero a mitad de recorrido Lilo y yo nos envenenamos solos y nos vamos a pillar a los de delante, un calentoncico, bah, no va mal.
Cuando llegamos arriba y comienza el descenso soltamos, no hace falta entrenar bajando a tope, eso tampoco mejora tanto, es mejor hacer socialización en este trozo. Y vamos bajando bien hasta llegar a la gasolinera del Pilar donde paramos a recargar agua. La mañana ha salido soleada y calurosa. Yo estoy sudando especialmente, ¿por qué? Pues no sé, pero me caen esos goterones salinos hacía los ojos que hacen que en ocasiones sufra unos picores que no me dejan ver nada, -piiiijo!  
En la carretera hasta las Mil Palmeras vamos en grupo compacto y luego iniciamos la subida hasta San Miguel de Salinas. Esta carretera me gusta, tiene unas zonas verdes y unas rampicas que se suben muy bien (todo es relativo claro). Aquí nos encontramos con un accidente muy reciente en el que están tendidos en la carretera una pareja (hombre y mujer, que ahora hay que decirlo todo) ya mayorcica que han sufrido un choque con un coche. Que no les pase nada!
Llegamos a San Miguel de Salinas y cambiamos de rumbo para iniciar Rebate, la carretera preferida de los guiris y que es una pasada, la verdad. Es variada, subida, bajada, zonas arboladas, muy chula y aquí tras unos inicios remoloneando en la cola del grupo a mitad me enchufo y empiezo a dar gas y así alcanzo a unos cuantos compañeros para llegar al cruce destino con buenas sensaciones. Hay que exprimirse cojones!

Tras reagrupamiento en el cruce de Rebate seguimos ruta y paramos de nuevo en Torremendo porque la deshidratación es alta hoy y se necesita más agua que en días anteriores. Además, ahora, tras el paso de la Fuente de Don Juan y llegada a Beniajan tenemos la subida a la Cresta.
En un principio no tenía idea de hacerla porque me toca ir a cuidar a mi madre y no disponía del tiempo necesario pero me animé viendo que no era muy tarde y tenía un margen. Al no tener incidencias en forma de averías o pinchazos la ruta ha sido rápida. Lo único que el paso por Los Ramos, Torreagüera, etc,... se hace muy pesado y el tiempo corre más de lo esperado. -¿Entonces qué? Hago mis cuentas y veo que al menos puedo subir hasta el cruce y bajar por Teatinos sin llegar a encumbrar lo que es la Panocha. Y eso hago, no tengo tiempo para más y dejo a los más fuertes y sobre todo más resistentes el honor de alcanzar el final de etapa. Menuda foto se han hecho. Entre ellos José María Pérez, el Profesor, que hoy le ha dado una clase magistral al alumno Ginés 'Espartaco' jeje que ha hecho novillos.

Por el camino de subida nos hemos encontrado a Frank Gómez que ha pasado la mañana en la Cresta sumando desnivel. Nos dice muertos y el muerto es él jajajaja, (es broma).
Anteriormente José de San José ha hecho camino por el Cabezo de la Plata, Garruchal, Cresta, Garruchal,.... qué fiera Diosss!

Hoy 25 de Mayo, aniversario del nacimiento de mi padre, ha sido otro gran día de ciclismo y de club.
¡¡Vamos zamarros!!
 
 

domingo, 19 de mayo de 2024

Sierras de Moratalla 2024

 

Queda ya muy lejano aquel 20 de Mayo de 2000 cuando hice por primera vez esta Marcha Internacional Sierras de Moratalla, recuerdo que fue la primera marcha que hacía en mi vida de estas características, la del estreno. En aquellos tiempos tenía un carácter más abierto en el que participaban muchos ciclistas de toda la geografía nacional. Ahora no hay tantos de fuera y la diferencia más grande es que muchos de los que ahora vienen van mucho más deprisa que los de entonces, el nivel medio del participante ha subido muuuucho, demasiado podríamos decir. Ahora 'hasta el más tonto hace relojes" en el sentido de que ya quedan muy pocos que salen a la aventura. La gente se prepara. Y se prepara mucho y bien.
Me embarqué como pasajero de última llamada, el último día y por la tarde. Me dieron un dorsal 409 aunque hubo otro que tardó más en decidir porque le dieron el 410. Pues ya'stá, ya la hemos liado.
- ¿Y a cual te has apuntado? -¿Yo?, a la larga, siempre que he ido a una marcha lo he hecho a la mayor, con dos cojones,.. o con tres. Y luego, como veremos, en Moratalla apuntarse a la corta no es tan mala idea.
En la partida somos un equipico bueno de Globeros de Élite, para hacer la larga están las dobles parejas, olé x4,  Paco Manzanera, Antonio Belmonte, Diego Meseguer y yo y para la corta Isaac y Nífer. 
No he tenido una semana muy plácida y estoy algo agostado y mal descansado, sobre todo para la dureza que tiene siempre esta marcha, una de las más duras y complicadas de España de siempre.
En la salida, con cierto nerviosismo esperamos a que suelten el chupinazo, recuerdo las ediciones de 2000 con mis calapies y cambios en el cuadro o en 2015 con mi Zeus de triple plato,... ahora ya estamos en 2024 y estoy plantado con la Canyon pintada con los colores del club yeahhh. Así que nada, cuando son las 9:00 nos vamos con el coche de control delante para hacer el tramo hasta Caravaca con velocidad controlada. Recuerdo a José Sánchez Nicolás lo bien que siempre ha llevado este coche de cabeza de carrera en cuanto a velocidad para que no se convierta en un elemento peligroso como sí fue en este caso, teniendo que estar continuamente dando frenazos y tirones con miedo de tener un enganchón y posterior caída. En uno de esos frenazos hace mi  pinza delantera un ruido muy feo y... pues creo que me he quedado sin frenos. Efectivamente, se han ido atpc las pastillas,... pffff, qué desastre! Uff,  a ver si gestionamos este inconveniente bien.
El día climatológicamente es perfecto, la temperatura justa, día soleado pero no en exceso,... increible. No se parece al día que me estrené en el 2000 que hizo un tiempo tipo asturiano, de nubes y lluvia.
En Caravaca se va el coche de seguridad y estamos en salida lanzada, hostiasssss y tanto, que pasamos por las calles de Caravaca, -en subida-, a tope, como si fuéramos los profesionales de la Vuelta a España. Esto no puedo llevar a nada bueno, es lo que estoy pensando mientras tiro y tiro para que no es escapé el tío ese de delante. Y ahora el Caracolillo, pues no es nah. Por si fuera poco estrés veo que salen hacía adelante Lilo y Felipe como rayos, nada nada, que se vayan que yo quiero sobrevivir un poco más de tiempo. Así que intento tomar un ritmo que, sin ser lento ni mucho menos, tampoco es para morir en la primera cuesta. Y así, buscando grupos de interés me muevo hasta Moratalla para pasar por segunda vez de cuatro que lo haremos. Vaya cansinería...
Tras paso por Moratalla hacemos la 'segunda salida' que resulta ser la tradicional de los viejos tiempos en la que manda la ruta hacía el Alto de los Álamos, puerto largo y duro para gente normalita como yo. Aquí el grupo que era grande se trocea enseguida y yo me quedo como a mitad un poco en solitario, lo mejor desde luego para no tener que ir forzado pero claro, durante la ascensión veo que el grupo delantero está cerca hmmmm, y al final me animo a cazarlos, mejor ir con ellos pienso. Justo por delante del grupo veo a Felipe, ah la ratita está ahí, a ver si la cazo pero joooer, me estoy atufando por lo que al cabo de un rato me suelto del grupo, paso. 

Cuando llego arriba estoy más solo que la una y recuerdo como me dijo Manzanera - la clave está en llevar un grupo bueno que te haga la bajada desde los Álamos a Caravaca. Pfff, pues de momento voy mal con esta instrucción. Estoy bajando, llaneando, bajando y me alcanza un grupo pero se me escapan porque van muy fuertes. Me engancho a un chico extranjero que va prudente pero que se le ve que tiene fuerza. Interesante. 
Llegamos al cruce de Campo de San Juan y giramos hacía el Sur para hacer ese pequeño puerto formando un grupo de media docena de ciclistas y luego bajando se va uniendo gente por detrás hasta formar un gran grupo. Hay un tiempo en el que parecemos una grupeta de amigos, así da gusto, un ratico de relax viene cojonudo. ¡Hasta se puede hablar!
Oootra vez llegamos a Caravaca, lo de hoy es día de la marmota, repetitivo, Caravaca x2 y Moratalla x4. Por tanto iniciamos el segundo Caracolillo, llegan quizás las mejores sensaciones del día subiendo por segunda vez el puerto. Pienso, a ver si ya empiezo a carburar bien pero qué va,... seguramente fue también de tipo psicológico.
Bajando y visitando Moratalla por tercera vez, -se dice pronto-, voy en un grupo de unos 20/25 y me estoy fijando que creo que todos van a la distancia corta y cuando llegamos nos suben por una calle atajo con una cuesta del copón y salen disparados como ratas de un naufragio y todos se cuelan por el pasillo que les dice que ya han terminado. Buff, y ¿ahora me voy yo? Son las 12 de la mañana, llevo 32 km/h de media, he hecho 100 kms, ¿por qué no me quedo, y disfruto de un buen aperitivo, (-¿una cerveza con marinera puede ser? ) con un cuerpo que ha trabajado pero que no está como un escombro. Mentalmente es muy complicado irse de allí pensando en la vueltaca que hay que dar, hacer más de lo ya has hecho y cuando el cuerpo ya está traqueteado,... estoy sólo además, aunque me junto con un 'Tortuga' colombiano que dice que se ha pasado a la larga, que si pasará algo,... jajajaja, claro que pasará, que te arrepentirás cobarrrrde.

En el avituallamiento de las largas rectas me paro a recargar, estoy empezando el proceso de demolición y el cuerpo no pide más que fin de fiesta pero queda, madre mía lo que queda....
Salgo solo de allí, nadie por delante (y aunque hubiera), nadie por detrás,.... rororororo, dando pedales para mantener, si hay repecho, mantener, si hay bajada soltar,... poco gas me queda. Voy como alma en pena.
Me llegan por detrás unos cuantos y al final me engancho con el de Onteniente, con el que converso un poco, poco porque cansa. Pero lleva un ritmo que más o menos lo puedo mantener, le digo que viene una subida muy dura y ¡no lo sabe! Mejor no saberlo seguramente. La pendiente esa baja que normalmente me gusta y se me da bien en esta ocasión me está desgastando como si fuera una lima y cuando llego al cruce de Benizar voy echando una peste a muerto que no veas. En el avituallamiento que hay allí paró de nuevo a recargar agua y sobre todo a descansar 'un poco'. Paro luego a hacer un pis y me pregunta el amigo del maillot de Moratalla si pasa algo, -no, un pis, no pasa nada (y todo)
Llegan la superrampa de Benizar... y con público, madre mía, qué espectáculo voy a dar, no puedo ponerme de pie porque se me enganchan los músculos de las dos piernas pero parece que sentado aguanto pero claro, a qué velocidad, tengo que dar una pena que paqué, -¡arrastro y canto las 40 en bastos! Nunca concibo la parada, eso es verdad, porque en mi vida jamás he puesto pie a tierra en una marcha de carretera y espero que siga así por más tiempo pero me pareció ver unas hormigas que me adelantaban subiendo jeje.
Bueno, tras un par de rampas criminales, luego viene una zona de 'descanso' al 8% y voy normalizando la situación pero siguiendo estrictamente el guión de la cámara lenta. Todavía queda un trecho y de nuevo viene una pendiente de mucha inclinación donde además hay un fotógrafo... -vaya, pues que haga foto y no haga vídeo porque se le acaba el rollo antes de que pase, qué agonía y qué rabia que no pueda apenas ponerme de pie.

Buff, pues hemos llegado a la famosa curva donde cede la pendiente pero no se puede cantar victoria porque Benizar todavía tiene más cosas que decir, de hecho psicologicamente son igual o más duras que lo pasado porque esos páramos y esas cuestas sobre lomas peladas donde no valen las ruedas y todo son ciclistas perdidos es ciertamente dantesco cuando vas en las condiciones en las que voy.
Las piernas no funcionan eso está claro pero a la cabeza le cuesta continuar y se instala como una losa que es difícil de transportar, me pongo algo de música para evadirme de las malas sensaciones. Estoy sufriendo sobre todo porque las piernas no marchan y además no puedo cambiar de registro, solo aguantar y aguantar.
Llega otro punto de avituallamiento y parada de nuevo, pero si estoy muerto,.... agua, golosinas,... tenía que haber cogido más. Estoy pajarraco total.
Quedan dos puertos, me aplico en la tarea y no quiero pensar nada más que en el momento en el que llegue al Alto de los Álamos. Va a ser la hostia!
Me pilla Carles, el de Cartagena de las brevets, y me supera sin poder seguirlo, luego llegan dos más y a estos los puedo aguantar y me voy con ellos, nos juntamos con Carles y luego más tarde con el de Moratalla. Sólo queda el último repecho, el definitivo pero no puedo aguantarlos porque tengo rampazos en las dos piernas y hasta en las orejas porque voy empujando ya con todo asi que bye bye, adiós amigos, ya llegaré.
Y llego, llego arriba, yupiii y ya, tirarme. Todavía en la bajada me pasan como unos cinco ciclistas más por lo menos porque no estoy ni para bajar de lo cansado que voy.
Llegada a meta y allí me encuentro con mis compañeros y ya se van aclarando todas esas cosas que durante mucho tiempo estuvieron espesas y vidriosas. Me falta una cerveza (o dos) para que se aclaren del todo jeje. Al final fueron tres y un rico plato de macarrones en compañía de mis compañeros, los que habían llegado ya y los que llegaron a continuación. Qué gustico me dió estar con ellos compartiendo las alegrías y las penas del día. El autorretrato que nos hicimos y que he puesto de portada del álbum describe muy bien las sensaciones del momento como grupo fraternal que somos. 
He hecho al final buen tiempo, llegando en una buena posición y siento satisfacción por lo conseguido a pesar de haber sufrido como un perro aunque aquí en Moratalla lo habitual, parecido a todas en las que he estado, eso también es verdad. Moratalla siempre te hace sentir el hierro. ¿Volveré? El tiempo lo dirá, cuando cruce la línea de meta juré y perjuré que nunca volvería a esta carnicería pero luego,... lo que pasa, que se olvida un poco lo malo y queda lo bueno.
 
 

viernes, 10 de mayo de 2024

Castillo de Novelda GE



Una jornada más de ciclismo y de compañerismo, otro día más, otro día menos que se dice, pero hoy ha sido una jornada especial y con recorrido inédito donde nos adentramos como grupo en nuevos territorios fuera de nuestra zona normal de influencia. En esta ocasión el destino final estaba en Novelda, en el Cerro de la Mola, a unos pocos kms de la población donde existe un complejo formado por el Castillo de la Mola y por el Santuario de Santa María Magdalena. Desde la colina donde se asienta todo se tiene una bonita vista del Valle del Vinalopó, famoso sobre todo por sus viñedos. Si el castillo de estilo mudéjar es interesante, -por supuesto-, especialmente llamativo es el santuario de estilo modernista que recuerda a Gaudi y a su Sagrada Familia y a mí, particularmente, a los castillos de chorretes que se hacen en la playa jajaja
Una característica de la salida hoy ha sido que el plantel ha sido 100% globero, no había ningún elemento espurio que contaminara la pureza del grupo, por supuesto sin ánimo de que esto parezca nada negativo, simplemente es informativo.
En la partida está José Miguel al aparato, que reparte el tiempo entre la Vespa de cartero, -amarilla-, y la Specialized de butanero, -naranja-. El abogado va afinando su línea y ha llegado hoy hasta Abanilla, palabras mayores pensando de dónde viene, la última vez pasó a malas penas Alcantarilla y otra no llegó ni al cruce del Cabezo, poco a poco Secre, te esperamos.
La asistencia hoy se compone fundamentalmente del grupo duro, por supuesto, aunque faltan un par de sujetos importantes, Zape y José de San José. El primero tenía compromisos de familia al parecer y el segundo de trabajo supongo pero a los dos se les echa en falta en días como el de hoy, de largo kilometraje.
En Santomera toma el mando Lilo y pone un ritmo interesante, lo que no sé si será el que haga que empiece a echar humo el motor del Secre pero lo miro (a él) y me recuerda al que fue en otros tiempos, no jadea como otros días y aguanta las embestidas parece que bien. Pues nada, subimos el Alto Vicente Contreras en una mañana que se presenta fresca de momento y en la que la subida sirve para calentar un poco los músculos. Al saltar los 'Tubos' me llega una llamada y es precisamente Vicente, el de la moto.
-¿dónde estáis? (V) -en los tubos y tú? -hostias, si que habéis corrido, yo por detrás. (V) -¿nos pillas? -si (V) -venga, pues dale puño. 
Aprovecha el Secre para decirme, dile a la cabeza que bajen el ritmo para esperar a Vicente y así no me atufo yo de más. -Ok Pero chico, a pesar de bajar el ritmo Vicente no aparecía y al final tuvimos que esperarlo en Abanilla, éste hoy no nos pillaba ni con la Kawasaki. Bueno, pues ya estábamos todos y Vicente mostrándose con su Berria con motor Polini(zado), mira a ver!
En la Cuesta Colorá tenemos sesión de cine para ver las estrellas del momento, los actores de reparto, los de relleno, el director, guionista, etc,... Por delante ya se ha ido el director de escena para adelantar cosas, Lilo, y se ha llevado a su ayudante francés Philippe y al asesor de imagen Rosagro, por detrás van dos actores principales, Jean Paul Belmonte y José Buytrago, por detrás el resto del reparto, Vicente, Esmeralda, Mari Cruz, Mari Carmen, Isaac, Germán, Profe, Espartaco y Alfonso. Yo voy moviéndome entre bastidores e intento cubrir con la cámara lo que puedo de la película.  Al cabo de un poco ya tenemos un spoiler de lo que será el futuro del estreno de hoy.

En cruce de Barinas reagrupamiento de libro. Una vez superada la principal dificultad del día llegan los llanos de Macisvenda donde rodamos con comodidad y donde nos podemos permitir un buen nivel de conversaciones. El Sol no termina de aparecer con decisión y el ambiente es relativamente frío y el ir de corto resulta en determinados momentos un poco justo pero bueno, tampoco molesta en exceso. Germán anuncia su próxima marcha en dirección al Albaterolo a pesar de la insistencia generalizada de que continuara con nosotros. Son 150 kms sí, pero de momento tienen pinta de ser equivalentes a 100/110 de etapa comanche. Vamos descontando kms rápido y sin sufrir. Así da gusto.
Tras llegar al Hondón y girar en dirección norte la carretera sigue favorable y la marcha igual (de bien), vamos como unos quince compañeros de viaje pero comodísimos. Estamos llegando al ecuador de la etapa a 30 de media ¿pa qué más?
En Novelda se gira de nuevo hacía el Norte y se divisa el Castillo a lo lejos, una estampa que parece sacada de los cuentos de Grimm, sobre una montaña y hecho con piedra de estilo churriflanero de playa (perdón).
Llega un punto en el que la carretera se hace de sentido único y al entrar en una zona arbolada de pinos la carretera comienza a empinarse... y los compañeros a escaparse. -Dónde vais zamarros? Tras hacerlo en pareja Felipe y Lilo salta Rafa como una fuerza bruta vanderpuliana alcanzando a la pareja en 'cerocoma' y reventardo 'to de toportó. Yo voy tras ellos y arranco pero a mi manera, -como Raphael-, sin alardes, y a ver si cae algo, y sí, parece que hay un macoco, Felipe, que está yendo de más a menos claramente, Rafa y Lilo van por delante pero tampoco es aquello de ir a mil, se les acabó el nitrometano al parecer y por detrás joooder, por detrás de pronto llega un Perkins de última generación que sube a 110 rpm y me revienta vivo,... Belmonte que ha pasado como Rayo Mcqueen y pilla incluso a los de cabeza tras dejarnos a los muertos por detrás. Es momento de tirar del comodín de la cámara (una vez humillado...) para echar alguna foto de las panorámicas del Castillo, pero lo que es verdaderamente llamativo no es el castillo sino como he dicho al principio el Santuario de Santa María Magdalena, bonito y original como él solo y hecho con piedra anaranjada de estilo modernista, gaudiano. De su interior, que por otra parte es sobrio y poco llamativo, sale una música de órgano que da gusto escuchar y que relaja. Por lo que he leído el órgano es una verdadera maravilla por estar hecho de mármol de la zona.
Tras las fotos iniciamos la vuelta a casa, -que queda lejos-, y buscamos un sitio para cargar agua. Yo, desde luego no necesito pero la gente lleva bidones pequeños y muchos beben más. En una gasolinera paramos y cargamos. Además de agua hay Heineken, la energía verde que provoca la explosión de la fuerza de Hulk, caracterizado en el día de hoy por Ginés.
En Garganta de Crevillente empezamos a poner un punto para que la gente no se duerma pero al llegar al primer collado nos sorprende Espartaco con un estacazo potente y profundo, no te creas que ha sido cosa de diez segundos no, hoy Ginés estaba transformado en una bestia verde que nos ha dejado a todos sentados y con la boca abierta viendo ese espectáculo. Ginés siempre ha sido un tío con clase al que le iba el repecheo pero últimamente le faltaba algo para seguir con las exhibiciones. A 'algo' le llaman Heineken, la verde.
Total, que una vez que han empezado las hostilidades por parte de Hulk ya se empieza a dar cera por tó y como el terreno tiene sus bajadas, sus subidas suaves y también sus curvitas, cada uno va demostrando qué materia le va mejor y empiezan las exhibiciones. Mari Carmen enloquecida como si no hubiera un mañana, Rafa tumbando en las curvas como Márquez, Ginés agachando el lomo y apretando las piennas, Belmonte con el Perkins que se le van a salir las bielas del sitio, Lilo pa qué decirte, Felipe, bueno, bueno,.... una locura de Garganta. 
Al llegar a Crevillente procedemos a una parada para que lleguen todos y ya nos vamos hasta Orihuela felices y contentos porque tenemos el viento favorable y porque la carretera da gusto ir por ella de lo buena que está. Ya en la subida al tunel de Orihuela comienza de nuevo el show de Espartaco dando cuatro zapatazos fuertes y alejándose como alma que lleva el diablo. Y cuando quise echarle una foto para inmortalizar tal momento el objeto en cuestión tenía un centenar de metros de distancia. Estelar, inconmensurable, brillante, excelso, bárbaro, soberbio, increíble, podrían ser varios de los calificativos a nuestro querido compañero y globero de pro Ginés Escudero.
Al bajar de Orihuela ya se van nuestros compañeros de Alquerías y Beniel y entonces llega una nueva revolución de los viejos, Coppi, Profe, Espartaco, y yo mismo vamos apretando el paso como si no quisiéramos nunca ceder paso a nadie. A tope hasta reventar cojones!!!

En Zarandona hacemos un final feliz acompañados de unas buenas jarras de cerveza los cinco magníficos que hemos quedado finalmente.
Etapa sensacional la de hoy. Esperemos tener muchas de estas y ¡¡que nadie nos eche nummca patrás mecaguendiez!!
 

 
 
 

viernes, 3 de mayo de 2024

Sierra del Oro GE



Hoy teníamos una etapa comanche entre manos, otra más, parecida a la de la semana pasada y contábamos con parecidos mimbres aunque intercambiando algunos cromos. Bueno, pensándolo bien, había faltas con respecto a la semana pasada pues nuestros compañeros los 'trastornaos' hoy han tomado un camino distinto y se han dejado llevar por el tiempo playero que daban las previsiones y han ido a ver el estado de la mar. Nosotros hoy, de interior, por tierras de Mordor. Empezamos...
Lo primero que hago al salir del portón de mi casa a las 7:55 y notar el sol radiante que ya calienta es dar la vuelta, quitarme los manguitos y meterlos en el buzón de la correspondencia, hala, ahí se quedan, -No me hacen falta-, además, me eché abundante crema protectora de Sol en los brazos.
Hoy en Carrefour Infante lo que más llama la atención es... la basura que inunda todo. Los marrrranos no viven todos en El Pozo, hay por aquí también y se dedican a ir a los conciertos y a tirar desperdicios por donde pasan. Todavía nos queda mucho por recorrer...
Cumplidos los minutos de cortesía salimos dirección Alcantarilla, entre nosotros navega 'nuestro' Frank Gómez, ciclista, corredor, entrenador y escritor, entre otros empleos. Nos acompañará hasta Barqueros, punto en el que decide no adentrarse en las tierras altas de los orcos. Otro ilustre que ha aparecido precisamente en Barqueros, donde Frankie se va, es José María, el Profesor, que se ampara en el refrán de 'Dios ayuda a quien madruga' y se adelanta a las cuestas, a las blancas y a las otras que hay desde que sales de Alcantarilla hasta que llegas a Barqueros.
En la Hero hemos recogido hoy al Primo al que echábamos de menos ya varias semanas. Su asistencia dice ha sido por gracia de su suegra, -para que luego digan-, apostados en el cruce también estaban Mari Carmen, Juan y Paco Manzanera, al que hoy le tocaba por aquí. Se echa de menos al resto de la patrulla 'águila' de Espinardo, Patricio y Paco que 'na más' que viven ya por y para el Coto.
De Murcia, la grupeta viene equipada con la dotación habitual de los últimos tiempos: Zape, Buytrago, Coppi, Belmonte, Lilo y Mari Cruz, Felipe (y no Esmeralda que hoy no le toca por aquí) Rafa Rosagro, Isaac y Espartaco, al que cito el último pero para destacarlo especialmente. Al que ponemos falta hoy es a José deSanJosé, que me pide kms y desnivel y luego,..... -¡luego no vienes zamarro!
Desde el principio se sabe que va a hacer calor pero cuando se pone de manifiesto de verdad es en la jodida (perdón) Cuesta Blanca que hace una daño por las mañanicas, buff, hoy ha sido Felipe, que está muy fuerte últimamente, el que ha sacado los petardos, y no los de peseta sino de los de duro, los gordos, y aquello ha saltado en mil pedazos, luego recomponer el destrozo ha costado tiempo pero hoy había voluntad de grupo y gracias a la colaboración de todos los compañeros hemos llevado las cosas bien hasta el final.
 
En el cruce de Barqueros hacía las tierras altas se paró el subgrupo delantero a esperar a los rezagados, entre los que estaba yo que hoy tenía vocación de pastor, comodín a utilizar cuando uno siente falta de fuerzas. El caso es que en el cruce nos despedimos de Frank y recibimos a José Mari, intercambio de cromos. Y nos adentramos en zona comanche de pleno. -Que no nos pase nah
Existen dos posibles opciones de gestión de grupo que funcionan, la primera dice que si apretamos y rompemos el pelotón, -cosa que está pasando-, luego hay que esperar para reagrupar, es importante remarcar que con sólo 30 segundos basta para ello porque ni los fuertes son Van der Poel y Pogacar ni los más flojos son inválidos, ojo. La segunda de las opciones es no apretar tanto y llevar el grupo unido sabiendo que los de delante es posible que vayan un punto por debajo de su nivel y los de atrás vayan al punto, como las carnes jeje. Al final entre una y otra fórmula hemos conseguido mantener al grupo bastante compacto, esa es la verdad, que es lo único aceptable por estos parajes de tierras comanches en los que si te quedas cortado por aquí te comen los orcos, seguro.
A Ángel, que nos lo hemos encontrado con el profesor en Barqueros, lo dejamos porque tiene unos recados que hacer en Pliego y nosotros nos encaminamos hacía los Baños de Mula por una carretera botosa, como dice Perico Delgado.

A partir de los Baños la carretera secundaria que te lleva hasta Yéchar es muy atractiva, con esas cuestas que serpentean por montañas aterronadas, los conocidos badlands para trepar hasta la meseta superior. Comentamos con Zape que ya nos lo conocemos todo, es difícil sorprendernos ya con algún recorrido pero bueno, no por conocido es menos feo tampoco, van tirando las zagalas con la energía y la fuerza que mueve el mundo, impresionante el nivel que han cogido las dos, Mari Cruz y Mari Carmen y porque hoy no viene Esmeralda, la que completa el tridente de Neptuno.
Llegamos a Yéchar y alguien empieza a echar carbón a la caldera, la subida a Fuente Caputa adquiere una temperatura importante  -¿A dónde vamos con tanta prisa? Le pregunto a Coppi. - Eso digo yo, ni idea. Me contesta. El asunto es que, en que me veo de seguir la estela del grupo, que además, en estos momentos es bastante numeroso. 
Tanta velocidad no puede ser buena, y cuando llegan unos repechos de más entidad, empiezan a aparecer paracaidistas a los que hay que esquivar -yee yee yee Y el grupo se va seleccionando, de momento aguanto allí e incluso diría que voy más cómodo que al principio, cosas de este deporte y de las cabezas. 

Hoy Lilo tenía ganas de liarla por donde pasaba y aquí empieza a apretar las tuercas al personal, Juan va silbando, este no cuenta, Philippe con garbo va resuelto, Rafa también acompaña con garantías, por detrás van resoplando Zape, Buytrago y Belmonte, tíos listos que saben lo que quieren por otra parte. Paco Manzanera no resopla pero tampoco parece que vaya demasiado pimpante, ya veremos. De pronto Felipe lanza un zarpazo, al que -no le responde nadie- jajajaja, -ya volverá pensamos los que estamos allí, Lilo mantiene la presión del turbo constante y Juan... va silbando. Atrapamos a Felipe 'al poco' y volvemos a hacer grupo, uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis,... no queda más aquí. De pronto llega un repechón y Lilo sube un punto, ufff, abro paracaídas, no puedo, si acepto el envite, duro cuatro metros, así que.... se van Lilo, Juan, también y consiguen acoplarse Felipe y Rafa, no más. Han quedado cuatro cuatreros en cabeza.
Pues nada, ya está, a llegar arriba como pueda. Al poco llega Paco por detrás y me enchufo con él, durante algunos metros mantenemos la distancia con el grupo delantero e incluso parece que nos acercamos pero Paco parece que me pide relevo y... yo no estoy por ello, bastante.... ¡muerto en vida chaval!
Bueno, pues ya hemos llegado al Alto de Fuente Caputa y van apareciendo los de la comitiva de festejos uno a uno, con su música, enseña y estandarte. Espectáculo del bueno: moribundos, muertos y zombies sobre todo.
A partir de aquí vienen los llanos del Cagitán, de gran belleza plástica pero de asfalto bastante rugoso, al menos el tráfico es muy reducido porque la carretera es muy estrecha y dificulta el adelantamiento de los vehículos al pelotón. El día está radiante y los paisajes son de postal. Vamos camino de Cieza y tras algunos toboganes al principio y un terreno peleón después llega la bajada hasta la capital de los chitos, bajada con cierto peligro pues hay pinos a ambos lados de la carretera cuyas raíces levantan el asfalto haciéndolo especialmente donde más sombras hay y por tanto donde menos se ven, así que hay que andarse con ojo y agarrar el manillar bien.

Justo al llegar al puente que cruza el río Segura recibo llamada telefónica que cojo sin mirar quién es, tengo a mi madre en el hospital y me alarmo aunque enseguida me informa Coppi que es él y que Alfonso 'el Primo' ha tenido un pinchazo. Pues nada, os esperamos aquí mismo.

En la parada hay uno que está especialmente inquieto, Ginés 'Espartaco', tanto que al final se nos va al avituallamiento, -conozco un chiringuito aquí a la izquierda... -hala, pues venga, luego te recogemos. El resto del grupo estuvimos esperando junto al río hasta que llegó el Primo, -menos mal, he tenido una explosión  dice. -Ya, ya te hemos visto en Fuente Caputa  -No, esa explosión no,bueno, también, jeje, pero esta vez ha sido la rueda.
Pues ya que estamos todos nos vamos, todavía tenemos tela que cortar. Rafa insta a la sedición del grupo cuando dice: - Vámonos a Murcia directamente, sin pasar por el Santuario. -¿Sin pasar por sitio santo? Hereje, al purgatorio vas sino es al infierno directamente! 
Así que abandonamos Cieza y nos acercamos al pueblo vecino, Abarán, donde la gente será encantadora, seguro que sí, pero el pueblo es feo como él solo. No sé cómo han podido hacerlo tan feo, menos mal que tiene el río que lo salva un poco.
Por el camino vamos buscando el chiringuito de Ginés pero no damos con él. Pues nada, que se arregle como pueda, igual está ya borrrracho en la barra y no quiere saber nada de bici-hip-cletas. En Abarán me pregunta Juan por la subida al Santuario, -como si le inquietara-, -dos kilómetros 'maomeno' pero lo duro solo al final, le comento.
Aquí me caí el año pasado, en la curva de las cabras, mal recuerdo me dejó y una mano que se ha quedado algo tonta desde entonces. Empezamos a subir y hace un calor insoportable, insoportable como el ritmo que han puesto los de delante, Lilo, Felipe, Paco y Juan, que va silbando. Por detrás se vive mucho mejor, -garantizado-, de tertulia y disfrutando más tiempo y mejor de la subida que yendo a fuego. Mi grupeto amigo está formado por Zape, Buytrago, Belmonte, Rafica y Mari Cruz. Poco a poco se va endureciendo la subida terminando con dos rampones de campeonato. Arriba unas fotos rápidas y nos vamos que se van a hacer las tantas para llegar a Murcia.
Junto al río, en Abarán, hacemos reagrupamiento y avituallamiento en un super donde cargamos agua y alguna Coca Cola y cerveza. Con reservas hídricas suficientes para lo que queda nos vamos y ya con ritmo sostenido y apretando de vez en cuando para templar las piernas en los diversos cuestarrones que hay por el Valle de Ricote nos plantamos en Molina con un calor de canícula, por encima de los 35º, que hace que los cuerpos no acostumbrados todavía se resientan. 
Tras la escapada de la daltónica Mari Carmen en el semáforo enfrente del viejo restaurante El Niño de Molina, iniciamos el Paso del Cabezo Cortao con paso tranquilo y sin apretones, impropio de nuestro grupo históricamente pero apropiado para la torraera que nos estaba cayendo encima a esa hora.
Quiero agradecer mucho el breve mensaje que me ha enviado Paco Manzanera después de la ruta en el que felicitaba al grupo por exprimirnos y agruparnos cuando correspondía. -Así es, así da gusto.
Otro día más hemos cumplido el recorrido. La semana que viene más (seguro) y mejor (por ver).